Estoy con la lectura del interesante libro The Emerging Markets Century. How a New Breed of World-Class Companies is Overtaking the World, una obra que viene a completar dos de las lecturas que hice durante las pasadas fiestas navideñas:
Todos esos libros dan para mucho, y creo que al menos haré una reseña de cada uno, forman parte de eso que llamé mi plan autodidacta sobre estudios asiáticos.
De Asia y de los mercados emergentes se habla cada vez más, y es que queramos o no, nos impacta de lleno. Algunos expertos dicen que estamos inmersos en unos tiempos que podrían llamarse como la tercera ola de la globalización.
La diferencia de hoy con respecto a las últimas dos décadas parece evidente, por un lado ya no sale tan barato fabricar en países como China, y por el otro se está produciendo una globalización inversa, ya que cada vez hay más empresas de países emergentes que compran empresas occidentales, convirtiéndose con ello en líderes de sus respectivos sectores o en competidores globales de las empresas occidentales que hasta hace no mucho eran consideradas de referencia.
Más allá de lo que un día fue competir en precio al producir barato, actualmente las grandes empresas de los mercados emergentes también compiten en tecnología y no se quedan cortas en eso del branding y la marca de lo que sabe mucho el amigo Juanjo Brizuela.
Nombres como países BRIC o emergentes son una etiqueta que vale (o valió) para clasificar y agrupar países, pero a la velocidad a la que van los cambios, quizá ya no sigan vigentes durante muchos años. Algunos organismos internacionales ya dicen que en menos de un par de décadas, el PIB de China, India, Rusia, Brasil o Indonesia superará al de los países del actual G7.
Aunque es evidente que no todo es PIB, ya que tanto en desigualdades sociales como en servicios públicos, la mayor parte de países emergentes dejan mucho que desear y necesitan mejorar inmensamente. No obstante, lo que parece claro es que estamos en unos tiempos de cambio en el que cada vez veremos más empresas y marcas globales que vengan de países emergentes.
Hoy en día, ya queda lejos aquello de tigres asiáticos para referirse a lugares como Corea del Sur, Taiwán, Hong Kong o Singapur, pues son ya lugares del primer mundo, con una importancia económica y estratégica espectacular y que forman parte de un planeta tan complejo como fascinante y contradictorio.